La importancia de crear y cuidar la imagen corporativa
Para toda empresa incipiente es necesario ir posicionándose poco a poco en la mente de los consumidores, la gran pregunta al iniciar un negocio es ¿cómo se logra ese posicionamiento? La respuesta a esa pregunta no es una frase, lo cierto es que se trata de un proceso que requiere de tiempo, creatividad y estrategia.
Es clave que en todo el proceso de creación y posicionamiento de la marca no se pierda el rumbo puesto que eso echaría por tierra el trabajo realizado. Y para no salirse del camino adecuado es necesario definir con anterioridad los pasos a seguir y las estrategias que se realizarán.
Lo primero es escoger un nombre de fantasía con el que será reconocida la empresa, éste debe ser fácil de recordar, representativo del producto o servicio y creativo. El nombre irá acompañado de un estilo gráfico, o logo, el que puede incluir logotipo (palabras), isotipo (imagen), o ambos.
Al definir esta gráfica también se debe hacer la correcta elección de colores corporativos, éstos serán de mucha importancia ya que la gráfica asociada a los colores es lo que permitirá a los potenciales clientes identificar a la empresa.
Todo este aspecto visual debe ser respetado en cualquier ámbito: anuncios publicitarios, sitio web, etiquetado de los productos, volantes, papelería e incluso en el espacio físico de trabajo.
Espacio de trabajo representativo
Una vez que se ha creado todo el aspecto gráfico de la empresa, es bueno llevar también estas ideas a las oficinas, sobre todo si la actividad de la organización exige recibir en este lugar a clientes y proveedores.
Y cuando hablamos de decorar la oficina de forma representativa respecto de la imagen corporativa no sólo se trata de poner en la entrada un pendón con el logo y nombre de la empresa, se trata de ir un poco más allá usando los colores institucionales correctamente en las paredes, alguna gráfica distintiva, etc.
Además, parte de la imagen corporativa tiene que ver con el espíritu de la empresa, si ésta es de extrema seriedad o más bien proyecta la idea de un equipo jóven. En el primer caso hay que inclinarse por lo clásico, tanto en los colores como en el tipo de muebles, sin dejar de lado el toque de modernidad.
Para un ambiente más distendido, relajado y de aspecto jóven, se puede jugar con la combinación de colores vivos y texturas diferentes en el mobiliario. Todo esto, dejado en las manos de expertos, pueden dar como resultado el espacio ideal de trabajo para los empleados y ejecutivos de la empress. Todo está en conocer la organización, evaluar la disponibilidad de espacios y saber de qué manera organizar el lugar.
